A medida que uno va generando sus propios ingresos y tiene la fortuna de poder ahorrar al menos algo de su sueldo, es momento de reflexionar: ¿Qué hacer con ese dinero? Porque como quién dice, plata quieta es plata pérdida.
Todos podemos aprender a invertir nuestro dinero con éxito. En países como Argentina, donde la moneda y la estabilidad económica del país son inestables, tener conocimientos sobre cómo asegurar un buen respaldo financiero será muy útil. Sin necesidad de ser un experto en finanzas, este es un campo en el que cualquiera que tenga algo de dinero guardado puede participar.
Dicho esto, no pienses que solo te estamos pidiendo que sepas cómo reinventar tus ahorros; también te explicaremos cómo hacerlo. Así que, si fuera vos, no me perdería esta guía para principiantes ni loco. ¡Seguí leyendo y después contanos qué tal te fue con tus primeros pasos como inversionista!
Empezar por: ahorrar
Si nos queremos introducir en el mundo de la inversión, vamos a tener que estudiar un poco. El tiempo que le dediques a este "estudio" va a depender de las ganas que tengas en convertirte en un inversor. De todas maneras, también se puede aprender a invertir sin tener que ser un inversor, con tan solo saber algunas cuestiones básicas del ámbito financiero ya alcanza, lo demás puede que venga solo.
Ahora sí, para adquirir conocimientos sobre el ámbito financiero vamos a tener que iniciar una investigación y de ahí armar tu propio análisis sobre lo que trata todo este mundo de las finanzas. Si testas abierto a seguir consejos, aquí te dejamos algunas formas claves de encontrar información interesante:
- La opción más clásica pero siempre confiable, los libros. Hay una amplia gama de libros que cubren diferentes aspectos de la educación financiera, tales como: "Padre rico, padre pobre" de Robert Kiyosaki, "El hombre más rico de Babilonia" de George S. Clason, "Dinero: domina el juego" de Tony Robbins, "Inversor inteligente" de Benjamin Graham y, "Piense y hágase rico" de Napoleon Hil, son excelentes puntos de partida. Además, existen libros más específicos sobre inversiones en el mercado de valores, fondos de inversión y gestión del riesgo.
- Otra alternativa son los cursos online. Plataformas como Coursera, Udemy y Khan Academy ofrecen una variedad de cursos gratuitos y de pago sobre educación financiera. Estos cursos cubren temas que van desde conceptos básicos de inversión hasta estrategias avanzadas de gestión de carteras.
- También pueden tomarse clases particulares con un profesor de finanzas, si estás con verdaderas ganas de introducirte y comprender ya no como un principiante, como generar ganancias. Incluso podes consultar solo por una vez y eso ya te pueda dar una pauta de donde estas parado. No dudes de consultar con Superprof por un curso economia, si esta es una de tus opciones.
- Por último, nunca esta de más investigar por tu cuenta en páginas web tales como, Investopedia, Bloomberg y Yahoo Finanzas que te pueden brindar recursos educativos, incluyendo artículos, tutoriales y herramientas de análisis. Estas plataformas son excelentes para mantenerse al día con las últimas noticias financieras y tendencias del mercado.
Después de haber obtenido la información necesaria como para empezar a buscar inversiones que este a fin con el dinero que tenes como ahorro, es crucial haber entendido al menos ciertos conceptos financieros. Es por eso que acá te dejamos una especie de "machete" para que te enfoques en estos temas si aún no te quedaron claros:
- Riesgo y rendimiento: Comprender la relación entre el riesgo y el rendimiento es fundamental para tomar decisiones de inversión informadas. Cuanto mayor sea el potencial de rendimiento de una inversión, mayor será el riesgo asociado.
- Tipos de activos financieros: Es importante conocer los diferentes tipos de activos financieros disponibles para invertir, como acciones, bonos, fondos de inversión, bienes raíces, y materias primas. Cada tipo de activo tiene sus propias características y niveles de riesgo y rendimiento.
- Diversificación y gestión del riesgo: La diversificación es una estrategia clave para reducir el riesgo en una cartera de inversiones. Al invertir en una variedad de activos financieros, sectores y regiones geográficas, puedes mitigar el impacto negativo de eventos adversos en el mercado.
- Bolsa de valores: Comprender cómo funciona la bolsa de valores y cómo se negocian las acciones es fundamental para cualquier inversor. Familiarizarse con los conceptos de oferta y demanda, índices bursátiles, y órdenes de compra y venta te ayudará a tomar decisiones más informadas al invertir en acciones.
Invertir tiempo en educarte financieramente es una inversión en sí misma y puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso en el mundo de las inversiones.
También se puede aprender acerca de educación financiera a través de aplicaciones como Instagram Y Tiktok.
Pasamos a: definir objetivos financieros
Cada vez nos vamos acercando más al paso final, pero antes de llegar al momento de acción debemos contemplar cuáles van a ser los objetivos financieros. El ahorrar por ahorrar puede servirle a algunos, pero esta claro que tener una meta siempre te va a ayudar a poder poner todo tu empeño en eso. Es totalmente necesario tener claridad sobre qué querés lograr financieramente en diferentes etapas de tu vida. Las metas pueden variar desde objetivos a corto plazo, como la compra de un auto o unas vacaciones, hasta metas a largo plazo, como la jubilación o la construcción de un patrimonio duradero.
Al definir tus objetivos financieros, es importante ser específico y cuantificable. En lugar de establecer metas de poco entusiasmo, como "ahorrar para el futuro", es mejor fijar objetivos concretos, como "ahorrar tanta plata para mi fondo de emergencia en los próximos dos años". Esto te permite mantenerte enfocado y motivado a medida que trabajas para alcanzar tus metas.
Además, es crucial pensar los objetivos según dos factores: la importancia y la urgencia. Por eso es que llegado este paso, vas a tener que determinar cuáles son tus metas más importantes y enfocar tus recursos en alcanzarlas primero. Otra cosa que no es menor y uno debe prestarle atención, es realizar un análisis para evaluar tu tolerancia al riesgo, y en base a eso establecer tus metas financieras. Si tenés un horizonte de inversión más largo, es posible que estés dispuesto a asumir más riesgos en busca de mayores rendimientos. Ahora, si tenés metas financieras a corto plazo, es posible que prefieras inversiones más conservadoras que minimicen el riesgo de pérdida de capital.
En última instancia, nunca dejes de revisar y ajustar tus objetivos financieros regularmente. La vida está llena de sorpresas, y tus metas financieras pueden cambiar con el tiempo. Es importante revisar frecuentemente tus objetivos y ajustarlos según sea necesario para asegurarte de que sigan siendo relevantes y posibles de alcanzar en función de tu situación financiera y personal.
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Concluimos con: invertir
Cuando llega el momento de invertir, se abre un abanico de posibilidades para hacer crecer tu patrimonio financiero. Una vez que ya hayas logrado establecer tu propio fondo de emergencia y te sientas seguro con tus conocimientos financieros, es el momento de actuar: invertir. Para dar paso a la acción, vas a tener que chequear cuáles pueden ser tus opciones y aquí es donde también queremos darte una mano.
Una de las opciones más comunes es el mercado de valores, donde puedes comprar acciones de empresas para participar en su crecimiento y recibir dividendos. De pronto sos una especie de dueño de Coca-Cola, ¿qué increíble, verdad? Los fondos mutuos son otra alternativa, que te permite invertir en una cartera diversificada de activos gestionada por profesionales.
Si estás buscando una inversión un tanto mas conservadora, podrías pensar en los famosos "bonos". Lo que tiene de positivo los bonos, es que ofrecen pagos de intereses regulares y una devolución del capital al vencimiento. Pero si esto todavía te parece un tanto difícil de sostener porque necesitas algo más tangible, podes pensar en la "vieja y confiable": los bienes raíces, ya sea a través de la compra de propiedades físicas o mediante la inversión en fondos de inversión inmobiliaria (REITs).
Además de estas opciones tradicionales, hoy por hoy, existen inversiones alternativas que pueden ofrecer oportunidades de rendimiento y diversificación. Una de ellas puede ser el crowdfunding inmobiliario, que te permite invertir en proyectos inmobiliarios con montos más bajos y menores riesgos que la inversión directa en propiedades. Por otro lado, actualmente podemos contar con el boom del mercado de criptomonedas, que ofrece la posibilidad de invertir en activos digitales como Bitcoin y Ethereum, que pueden tener un alto potencial de retorno, aunque también implican un mayor riesgo.
Al explorar estas opciones de inversión, es importante diversificar tu cartera para mitigar el riesgo y maximizar el potencial de retorno. No hay una única estrategia de inversión que funcione para todos, por lo que es fundamental realizar una investigación exhaustiva y consultar con un asesor financiero antes de tomar decisiones de inversión importantes. Con una planificación cuidadosa y una comprensión sólida de tus objetivos financieros, puedes construir una cartera de inversiones que te ayude a alcanzar tus metas a largo plazo.
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