Desde Beethoven hasta The Piano Guys, el piano es un instrumento que cautiva a músicos profesionales y aficionados. Es el protagonista de composiciones que te ponen la piel de gallina y es una parte fundamental de la música clásica y contemporánea: lo disfrutan tanto los Boomers como la “Generación Z” con los artistas en redes sociales.
De una inmensa complejidad, el piano tiene más de 12.000 partes, de las cuales la gran mayoría se mueve.
¿Alguna vez te preguntaste cómo está hecho un piano? ¿Cuál es su historia? o si ¿es difícil aprender? Si alguna vez te emocionaste escuchando este instrumento, no te podés perder estos cinco datos sobre los pianos para conocerlos desde dentro.
La historia del piano
El origen del piano nos remonta trescientos años atrás, a principios del siglo XVIII, cuando Bartolomeo Cristofori emprendió la odisea de crear un instrumento que permitiera a un músico tocar distintos registros tonales. En ese momento los instrumentos eran difíciles de ajustar, lo que limitaba bastante el rango de sonidos. Justamente, Cristofori lo nombró originalmente como gravicembalo col piano e forte, que se traduce del italiano como “clavecín con (sonidos) suaves y fuertes”. Con el tiempo su nombre se acortó a fortepiano, y finalmente, piano.
El genio de Cristofori es el sistema de pequeños martillos que golpean las cuerdas, generando los sonidos característicos del instrumento. Así, un concertista podía pasar de los tonos bajos, cálidos y sonoros; por las medias octavas, mucho más dinámicas; a los tonos agudos, de sonido breve y brillante. El fortepiano resultó ser un invento dinámico que revolucionó la música barroca de la época, y sería protagonista durante siglos de las composiciones de músicos como Beethoven, Chopin, Mozart o Schubert, entre muchos otros.

El instrumento evolucionó a través de los años en el piano moderno que conocemos hoy. Actualmente sobrevive uno solo de los pianos originales de Cristofori, que se encuentra en el museo Metropolitano de Nueva York. Se trata del ejemplar más antiguo del mundo, creado en 1720 y que aún se puede tocar. Una rara pieza que seguro pertenece a la lista de pianos más sorprendentes del mundo.
¿Qué tipo de instrumento es el piano?
La pregunta que siempre hacían en las pruebas teóricas de música en el colegio: “¿A qué familia de instrumentos pertenece el piano?”. Pero hay una trampa: el intrincado sistema de piezas que siempre tiene un piano lo vuelven difícil de clasificar. Algunos dicen que es de percusión, otros, de cuerda.
Lo primero que debemos saber es que existen dos tipos de piano: los acústicos, que pueden ser verticales o de cola; y los digitales, que como su nombre indica funcionan con un sistema eléctrico. Los pianos acústicos producen sonido cuando el músico toca las teclas, que desencadenan un martillo de madera que golpeará las cuerdas. La vibración que esto genera se transmite a una tabla armónica con la que se hacen audibles los sonidos.

El protagonismo de las cuerdas hace que muchos categoricen al piano dentro de la familia de las cuerdas, al ser similar a las arpas y las liras en su funcionamiento. Incluso se piensa que el antepasado más arcaico del piano es el monocordio, un instrumento de una sola cuerda que ya figuraba en los textos sumerios.
Pero aun así, el sonido del piano depende del pequeño martillo que hará vibrar las cuerdas, por lo que también pertenecería a los instrumentos de percusión. Su intrincado sistema hace que, técnicamente, el piano esté dentro de ambos grupos, ya que el piano es un instrumento de cuerdas que se toca de forma percusiva.
El piano ofrece el mayor rango tonal de todos los instrumentos
Típicamente, aunque no siempre, un piano tiene 88 teclas con siete octavas. Comparado a las cuatro octavas de una guitarra o un violín, el piano es el instrumento con mayor rango tonal de todos. Permite pasar de esos sonidos graves y profundos que hacen vibrar un salón, a los agudos más altos.
El piano es el único instrumento cuyo rango tonal abarca todos los instrumentos de una orquesta clásica. Supera las notas más bajas de un contrafagot, y los agudos de un flautín piccolo.
Es tan dinámico que incluso algunos fabricantes agregan rangos de sonido a sus instrumentos. Bösendorfer, marca que está entre los mejores pianos del mundo, alarga su teclado, que llega a 92 teclas. Así, sus pianos de cola producen más sonidos graves y llegan a las nueve octavas. En este video pueden escuchar lo profundo de los sonidos de esta reconocida marca austríaca (recomendado escuchar con auriculares).
¿Por qué las teclas son blancas y negras?
¿Negras con blancas o blancas con negras?: si alguna vez te preguntaste por qué estos son los colores clásicos de las teclas de un piano no vas a ser el primero, ni el último.
Se especula que los colores fueron elegidos porque separan visualmente las partes, lo que ayuda a los pianistas a guiarse entre los sonidos. El negro rompe con el padrón blanco y divide las teclas en octavas.
Un dato interesante es que antes los colores estaban al revés: las teclas blancas eran negras; y las negras, blancas.
Otros también señalan que originalmente las teclas se hacían con ébano y marfil, cuyos colores naturales son el negro y blanco. Estos se utilizaron al menos hasta los años cincuenta, cuando Estados Unidos prohibió las piezas de marfil para proteger a los elefantes de los cazadores ilegales que los matan por sus colmillos.

La razón por la que se popularizaron estos materiales es que el marfil tiene un tacto y agarre único. Aun así tiene su lado negativo: al ser poroso, las teclas se ensucian rápido y se vuelven amarillas. Además, se agrietan fácilmente.
Actualmente las teclas de los pianos se realizan con plástico o marfil sintético; que aunque tal vez no provoquen la misma sensación que el auténtico, se conservan por más tiempo (y no arriesgan a una especie entera).
¿Es difícil tocar el piano?
La pregunta del millón: ¿qué tan difícil es aprender a tocar el piano? ¿Cuánto tiempo se tarda en aprender? ¿Puedo empezar de grande o es mejor hacerlo cuando sos chico?
Formarse en una habilidad nueva siempre trae dudas, miedos y muchos errores; pero la clave para aprender a tocar el piano está en la práctica. El piano está entre los instrumentos más difíciles de dominar porque requiere no solo de habilidades mentales, sino también de coordinación y oído musical. Podés tocar durante años y aun así descubrir técnicas nuevas. Pero tal vez eso es lo increíble de tocar el piano ¡siempre te sorprende!

Joshua Ross es un concertista profesional de Florida, Estados Unidos. El pianista -quien ha tocado en el mítico Carnegie Hall- cuenta las que para él son las claves para aprender este instrumento.
- Paciencia, pequeño saltamontes: Sí, el Concierto de Piano n.2 de Rachmaninoff es una composición espectacular, pero tal vez no apta para principiantes. La paciencia es fundamental a la hora de aprender el piano. La técnica es algo gradual, pasito a pasito. Así como los bebés aprenden a caminar, requiere tiempo desarrollar los músculos para el pianoforte. Lo que sí, hay que mantenerse motivado para no tirar la toalla a mitad de camino.
- Un buen profesor: Saltar solo a la pileta tal vez no es la mejor opción con este instrumento. Para Ross, apostar por un buen profesor de piano vale cada centavo. Aunque es totalmente posible hacerlo solo, un maestro puede ayudarte a sobrepasar los obstáculos con los que -seguro- te vas a encontrar. Un buen profesor te va a enseñar no sólo la técnica sino también te va a ofrecer el apoyo para que sigas intentando. “Un buen profesor de piano te dará una sensación de dirección”, sostiene Joshua Ross. (Y si de buenos profesores se trata, podés revisar los que están en Superprof)
- Perseverancia o las famosas “horas silla”: Aprender a tocar el tiempo significa invertir tiempo, mucho tiempo, frente al instrumento. Esa es la clave: pasar “horas silla” practicando el piano de forma consistente. Para Ross eso no significa estar ocho horas seguidas sin parar -como sí lo hacen algunos profesionales-, sino programar un espacio -ya sea tomando una clase de piano online o presencial, o de forma independiente- en tu día a día para tocar el piano.
- Lo esencial es el músico, pero un buen instrumento ayuda: Aunque parezca obvio, un buen piano sí te ayuda a tocar mejor. Según Ross, con un instrumento de calidad podrás desarrollar mejor tu técnica y obtener resultados. Incluso un mal piano puede generar lesiones. Pero no vayas todavía a comprarte un piano de cola carísimo todavía. Está bien comenzar con un piano vertical o un teclado y mientras vas avanzando, considerar en comprar un instrumento mejor. No necesitas el piano más caro del mundo para aprender a tocar, pero un buen instrumento da más alegrías que tristezas.
Entonces, ¿es difícil aprender a tocar el piano? La respuesta corta es: depende. Depende qué es lo que quieras lograr y si estás decidido a aceptar el desafío.
¿Te enganchamos con este instrumento fantástico? Podés comenzar a aprender hoy con alguno de los cientos de profesores de piano en Argentina que tenemos en Superprof.


















